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¿Quién dijo que la política
estadounidense está paralizada?
Una oleada de políticos de ambos
partidos que apenas hace unos años se oponía a la Reforma
Migratoria está ahora apoyándola.
En todo el país, un número
significativo de funcionarios electos que antes había estado en
contra de permitir que los inmigrantes indocumentados se convirtiesen
en ciudadanos estadounidenses está ahora hablando de "crear un
camino" para ellos.
Y hasta se espera que un grupo
bipartidista de senadores presente un proyecto de ley en ese sentido
el 8 de abril.
Es agradable pensar que la lógica y la
razón finalmente han llegado a la cabeza de los representantes
electos, pero la verdadera explicación de ese cambio es más
prosaica: Es un asunto de "opinión pública".
Es que la opinión pública, se ha
movido en favor de la Reforma Migratoria.
Una encuesta reciente, encontró que
el 71% de los estadounidenses dicen que debe hallarse una forma para
que la gente que ya viven en el país de manera
indocumentada puedan permanecer legalmente si cumplen con
ciertos requisitos.
La mayoría está a favor de
proporcionarle a los indocumentados algún tipo de estatus legal.
Y el 43% dice
que se les debe permitir solicitar la ciudadanía.
Es posible que la opinión pública
este siendo influenciada por valientes líderes electos que instan a
tomar acción sobre esta cuestion.
Pero la verdad es que la mayoría de
los políticos tienen un agudo sentido respecto de los puntos de
inflexión de la "opinión pública", y cuando, el apoyo a un tema
alcanza amplia base, y sus defensores están suficientemente
organizados para movilizarse, se dan cuenta de que oponerse puede
hacer un infierno de su vida política.
¿Por qué los políticos escuchan
ahora lo que dice la opinión pública sobre la inmigración?
Tal vez porque los números amenazan su
permanencia a largo plazo.
Tal vez por que ya se han dado cuenta
que cualquier gesto anti hispano puede hacer saltar las alarmas en
las salas y comedores de los hogares de millones de votantes latinos
del país, mismas que, a su vez, pueden desencadenar "un
matadero" en las próximas elecciones.
Piense en eso y puede empezar a
entender el panorama que los representantes están viendo llegar.
Es bueno que los políticos sean
sensibles a los cambios en la opinión pública, después de todo esa
es una característica que vale la pena celebrar.
Durante mucho tiempo la democracia
estadounidense se había mostrado insensible, y los
políticos notablemente impermeables, a escuchar a la opinión
pública en muchas cuestiones que afectan los destinos del país, pero gracias a Dios, esa característica
preocupante de ambos partidos esta cambiando.
Y eso, creo, lo seguiremos viendo en
temas tales como la "Igualdad en el Matrimonio" y el "Control
de las Armas".
Amén!
