domingo, 23 de junio de 2013

La Seguridad Fronteriza, Solamente Una Ilusión

Por Aníbal E. Melo
http://www.AnibalMelo.com
AnibalMelo@yahoo.com


La frontera entre México y Estados Unidos corre a lo largo de 3,169 kilómetros.

Desde el Pacífico hasta el Golfo de México, atraviesa desiertos, ríos, ciudades y un paisaje que corre paralelamente a las historias que tienen los habitantes de ambos lados. 

La cerca no cubre la totalidad de la frontera, pero en el lado estadounidense está vigilada por miles de Agentes federales, además de cercas de concreto, cámaras infrarrojas, y drones de vigilancia aérea. 

Ahora, y luego de llegar a un acuerdo para proporcionar $30 mil millones de dólares adicionales para "seguridad de toda la frontera sur" y de prometer "duplicar el número de Agentes", el Senado parece estar más dispuesto que nunca a aprobar la Reforma de Inmigración 2013. 

En mi opinión, esa cifra es una exageración. 

Me explico:

En el 1990, la asignación total para el "Servicio de Inmigración y Naturalización", en particular para la frontera, fue de $1.2 mil millones.

En el último año fiscal, las Agencias relacionadas con la frontera recibieron casi $18 mil millones de dólares, más que el FBI, el Servicio Secreto, la Administración de Control de Drogas, el Servicio de Alguaciles y la Oficina de Alcohol, Tabaco, Armas de Fuego y Explosivos combinados.

En resumen, en los pasados 5 años Estados Unidos ha gastado $106 mil millones en vigilancia fronteriza y ha aumentado el número de Oficiales que la patrullan a 21,394.

Todo eso se ha reflejado en la caída de los cruces ilegales.

Y las detenciones están en un mínimo histórico: De 1.6 millones en el 2000, a 356,873 el año pasado.

Imagínense, en el 2012, el financiamiento del "Departamento de Seguridad Nacional", del "Departamento de Aduanas y Protección Fronteriza", y de "Inmigración y Control de Aduanas", juntos, fue de $17.6 mil millones de dólares.

Y esa cifra no cubre programas, tales como el "US-VISIT", y el "E-Verify", ni los gastos del sistema judicial federal, estatal, o local.

Según expertos, la financiación y dotación de personal de "ICE" y "CBP" superan a la del "Departamento de Justicia".

"CBP" y "ICE" también reciben 16 veces más fondos que las tres principales Agencias que regulan las normas laborales en los Estados Unidos.

Y me surge la siguiente pregunta:

¿Está Estados Unidos realmente en necesidad de invertir tanto dinero en la frontera?

Las aprehensiones migratorias, indicador de las entradas ilegales, se encuentran en niveles históricamente bajos.

En el año 2005 en Arizona, por ejemplo, cada Agente de la Patrulla Fronteriza arrestó un promedio de 106 inmigrantes. El año pasado, cada agente arrestó sólo 17.

Eso no es sorprendente, dado el aumento exponencial de los Agentes que resguardan esa zona en los últimos años.

Hay una gran necesidad de más de esos funcionarios, pero, en los "Puertos de Entrada".

Un argumento para aumentar ahora la financiación de la frontera, es que las entradas ilegales aumentarán significativamente cuando la economía se recupere por completo.

Su corolario es que el crecimiento de la población no autorizada se detuvo después del 2007 debido a la crisis económica.


Dos teorías se ofrecen para apoyar esa afirmación:

1) La crisis financiera provocó el regreso de miles de inmigrantes no autorizados a sus paises de origen, y
2) La mala situación económica provocó que la afluencia de inmigrantes no autorizados disminuyese.

Pero la verdad es que la población indocumentada dejó de crecer porque las nuevas entradas, se redujeron drásticamente desde el año 2000, mucho antes de la crisis financiera.

Entiendo que tener una robusta seguridad fronteriza es esencial, pero hay dos razones para no adicionar tantos nuevos recursos.

En primer lugar, el "Programa de Trabajadores Temporales"  previsto por la ley "S.744" es una manera más rentable para reducir los intentos de entradas indocumentadas, ya que en la medida que más trabajadores vengan legalmente, las entradas irregulares se reducirán aún más.

Entonces, y sólo entonces, la "Patrulla Fronteriza", podría ser capaz de enfocar sus recursos hacia la detención de criminales peligrosos, sobre las amenazas de seguridad nacional, y en la lucha contra las drogas.

Por otro lado, el incremento en la vigilancia fronteriza ha hecho que le sea más difícil a los trabajadores no autorizados el poder salir y regresar del país, por lo que deciden permanecer dentro de los Estados Unidos.

Según un estudio del "INS" de finales del 1990, casi la mitad de los detenidos tratando de entrar por la frontera eran inmigrantes que regresaban.

Antes del 1968, eso no sucedía , ya que no había ningún límite numérico respecto de la inmigración desde los paises del Hemisferio Occidental.

La limitación de la inmigración legal, sin establecer un "Programa de Trabajadores Temporales" a gran escala, cambió el patrón de circulación.

Y la migración con flujo hacia el norte se volvió permanente.


Estudios demuestran que los "overstays" (personas que entran con Visas y se quedan) aumentan en la medida que crece la vigilancia en la frontera.

En estimaciones hechas por el "Servicio de Inmigración", entre el 1985 y el 1992, el total de los "overstays" fue de alrededor de 269,000 por año.

No hay estimaciones similares para los años 1992 - 2013, sin embargo, la presión contra los indocumentados realizada en la frontera en los últimos dos decenios, podría haber incrementado ese número.

Es por eso que estoy convencido de que un aumento adicional de la vigilancia fronteriza no va a producir rendimientos decrecientes de la inmigracion indocumentada.

Otorgar recursos adicionales a las fuerzas fronterizas podría ser innecesario en el mejor de los casos, y en el peor, contraproducente.

Sin embargo, otorgar beneficios adicionales para reducir las entradas ilegales en los "Puertos de Entrada" podría frenar los "overstays", así como otros métodos de entrada ilegal, como la entrada de polizontes y la entrada con documentos falsos.

Los "overstays" cayeron dramáticamente después del 11 de septiembre del 2001, y siempre que los niveles actuales de seguridad se mantegan en su lugar, dichas violaciones deberían permanecer en niveles bien bajos.

Por su parte, la plena aplicación del programa "E-Verify" debería ayudar a reducir el número de trabajadores indocumentados.

Soy escéptico de las afirmaciones de que el Gobierno Federal puede asegurar "totalmente" las 1,969 millas de frontera con México.

Esa afirmación puede atraer votos republicanos en favor de la Reforma, pero no va a hacer mucho para realmente "sellar" la frontera.

Los estadounidenses pueden construir muros y triplicar el número de Agentes si desean, pero no eso no va a hacer mucha diferencia.

No hay ningún impedimento para que una persona venga sin documentos, si eso significa poder alimentar mejor a su familia.

Insistir en el hecho de que el flujo de indocumentados se encuentra en un mínimo histórico porque Estados Unidos gasta miles de millones de dólares, muestra lo poco que algunos Senadores entienden acerca de la pobreza en América Latina.

En mi opinión, hay razones por las que menos personas están llegando al país, y ninguna de ellas se origina en Estados Unidos.

Pero para mi, el elefante en la bancada del Congreso, el verdadero problema, es el deseo de los anti-inmigrantes de retrasar el inicio de la parte del programa de legalización más importante: el de la aplicación para obtener la Residencia Permanente.

Me pregunto, ¿Cuál Administración o Congreso, algún día, hará la determinación de que la frontera es totalmente segura?

Apuesto a que los legisladores "Pro-seguridad fronteriza" piensan que eso probablemente nunca sucedera.

Ellos dicen que quieren proteger la frontera, pero cuando uno escucha los detalles sobre lo que piden, se pone muy en claro que lo que realmente desean es impedir que los actuales indocumentados, algún día, puedan llegar a ser elegibles para obtener la ciudadanía.

Es que hay una gran diferencia entre "reforzar" y "sellar".

Una de ellas es viable, la otra es una fantasía.

De todos modos, sospecho que todo este "espumaso" de la "Enmienda de nuevos gastos fronterizos" se debe, a que los senadores republicanos que quieren bloquear la Reforma 2013 quieren impedir a toda costa, que los beneficiarios de la misma nunca puedan siquiera llegar a hacerse Residentes Permanentes.

Decir que no podemos abrir el camino hacia el estatus de "LPR" antes de "totalmente asegurar la frontera sur", es como decir que no se puede continuar con el programa de "Cupones de Alimentos", mientras Estados Unidos no elimine la pobreza. 

Eso nunca va a suceder, y ellos lo saben!