domingo, 16 de junio de 2013

El Camino De La Libertad Inicia En Las Escuelas

Por Aníbal E. Melo
http://www.AnibalMelo.com
AnibalMelo@yahoo.com


La clave para "ganar el futuro", una de las frases favoritas del Presidente Obama, es educarse.

"No hay un camino más seguro hacia el éxito, que una buena educación", ha dicho muchas veces el Presidente.

Rara vez ese mensaje ha resonado tanto como ahora.

Aquellos que no estudian, encuentran trabajos fuera del sector público o fabril, en donde alguna vez los buenos empleos estuvieron disponibles sin una titulación superior.

Pero ahora, sus empleos son en el sector de servicios, que tiene salarios bajos, y en los que no se necesitan credenciales.

Es el nuevo lugar de los marginados, de los que no estudian

Así, y mientras que últimamente se ha puesto de moda el especular acerca de los niños de clase media que abandonan los Colegios de las élites para aventurarse en el mundo empresarial, una tendencia totalmente diferente ha sido desplegada en la América Hispana.

Los hispanos están registrandose en las Universidades en masa, en todos los niveles de la educación.

La inscripción de los Hispanos en los Colegios Universitarios en el otoño pasado fue del 69% , dos puntos porcentuales más que la tasa entre los blancos.

Están inscribiendose para recibir todo tipo de enseñanza superior a medida que buscan nuevos refugios contra un mercado laboral permanentemente deprimido.

GED, grados asociados, licencias comerciales, certificaciones, lo que sea.

Pero esa prisa de los hispanos para escolarizarse, también ha llevado a muchos a estrellarse contra un camino tristemente familiar.

Al igual que con el mercado hipotecario de la era "pre-colapso", los hispanos que acaban de entrar en el juego de la Educación Superior se han visto secuestrados por las manos de impenitentes estafadores.

Los estudiantes hispanos, están aterrizando de manera desproporcionada en las Escuelas privadas, y no en los menos caros Colegios Comunitarios o Universidades públicas.

Eso significa que se han encontrado a sí mismos cargados con deudas inimaginables, mientras que un pequeño grupo de actores financieros hacen una gran cantidad de dinero fácil.

¿Les suena familiar?

Les doy varios puntos si oyen los ecos de la crisis hipotecaria.

En este momento hay una tendencia que erosiona las posibilidades de los hispanos para obtener acceso a los reducidos puestos de trabajo que llevan a convertirse en clase media.

Es cierto que la clase media del país está colapsando para todos.

Pero esa tendencia es más profunda entre los hispanos.

En el año 2012, el Censo encontró que en Estados Unidos, 1 de cada 4 hispanos vive por debajo del nivel de pobreza.

Y para muchos, el costo de las Escuelas Universitarias ha engrasado esa tendencia hacia la baja.

Casi todos los graduados de las escuelas privadas, 96%, según una encuesta del 2008 del "Departamento de Educación", se gradúan con deudas aplastantes.

En el año escolar 2009-2010, la industria de los préstamos estudiantes se comió el 25% de la ayuda federal para los estudiantes.

Esa es deuda que los estudiantes no pudieron pagar.

Y la tasa de morosidad entre los estudiantes universitarios de las escuelas privadas es más del doble que la de sus pares de las escuelas públicas, ya que muchos de los Títulos y Certificados que los estudiantes hispanos están logrando, son trampas hacia la pobreza, no trampolines para la prosperidad.

Gracias a Dios, la atención pública sobre este problema ha ido creciendo, debido en parte a los esfuerzos desplegados por la Administración Obama para frenar las excesivas ganancias de las Escuelas privadas, sin duda, uno de los principales objetivos políticos del Presidente.

Muchos no comprenden que una buena educación es el principal desafío en la mejora de las economías de las familias hispanas.

La crisis de los empleos hispanos inició en la recesión del 2001, misma de la que muchos barrios latinos nunca se han recuperado.

Los trabajadores y las familias hispanas han estado luchando desde entonces, tratando de encajar en una economía quebrada.

Pero todo el esfuerzo latino por mejorarse a sí mismos, por poner en marcha el espíritu americano de superación personal, en contra de todas las probabilidades, a menudo lleva a los hispanos a verse entre las fauces de grandes capitalistas depredadores.

Desde las Tarjetas de Crédito, los Préstamos Hipotecarios y los Préstamos para Educación de alto riesgo, hemos sido abusados, una y otra vez.

Señor Presidente, no deje que nuestros mejores y más brillantes jóvenes, se sigan deslizando más en deudas y pobreza.

Hay que ampliar el acceso a los estudios.

Hay que controlar a los depredadores estudiantiles.

Es la única manera de erradicar el círculo vicioso de la pobreza.