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El racismo juega
un papel muy importante en el debate sobre la Reforma Migratoria y no
debe ser ignorado.
Creo que lo que
realmente a retrasado la realización de una Reforma Migratoria es el
racismo.
Hay cartas de raza
jugadas por personas en ambos lados.
Algunos
anti-inmigrantes consideran que una mayor inmigración de alguna
manera va a diluir el poder y la cultura del americano blanco
anglosajón. Se equivocan.
Por otro lado,
algunos pro-inmigrantes creen que Estados Unidos ha sido por
demasiado tiempo un país dominado por blancos y que la próxima
oleada de inmigración va a corregir lo que ellos perciben como
errores neo-coloniales.
Piensan que aquí
se oprime a las minorías y que de alguna manera si las personas a
las que clasifican como "sufridas" son la mayoría, habrá
algún cambio que les hará justicia.
Esas personas son
tan dañinas como las primeras.
La prensa no lo
está discutiendo, pero cada vez que hay una marcha y la gente ondea
cualquier otra bandera excepto la americana, hay un elemento
anti-estadounidense detrás.
Si la gente quiere
ser estadounidense, cree en los valores políticos de los Estados
Unidos y juega con sus reglas, se deben crear vías para su
inmigración.
Pero si quieren
venir aquí y de alguna manera cambiarlo todo, deberían volver de
donde vinieron.
Pienso que los
racistas en ambos bandos, no entienden la historia americana.
En cada generación
de estadounidenses están aquellos que sienten que la próxima ola de
inmigrantes arruinaría o cambiaría al país.
Pero si nos
fijamos, casi todos los grupos de "forasteros", han tenido
que "pasar un centro" antes de ser aceptados por completo.
Todo comenzó con
una persona que se quejó de que los inmigrantes alemanes y su
religión extraña arruinarían a América, que nunca encajarían.
Esa persona fue Benjamin Franklin y los inmigrantes eran los Amish.
Lo mismo se dijo
de los irlandeses, Judios, italianos y polacos en el Siglo 19.
Luego, la Ley de
Exclusión de los Chinos en el Siglo 20.
Recordemos que uno
de los argumentos de los Confederados era que los negros nunca serían
americanos.
Los que quieren
castigar a Estados Unidos no entienden que la gran mayoría de los
inmigrantes quieren ser estadounidenses y que estas personas vienen a
trabajar, a pagar impuestos, y acaban amando y construyendo una
nación más fuerte.
Los racistas "pro" o "anti" no entienden que lo que ha hecho grande a esta nación son las ideas.
No es la
diversidad de raza, sexo, religión, origen nacional, u orientación
sexual lo que hace grande a Estados Unidos.
Siempre han sido ideas como las siguientes lo que más importa:
"...todos los hombres son creados iguales; que son dotados por su Creador de ciertos derechos inalienables; que entre estos están la vida, la libertad y la búsqueda de la felicidad... "
Thomas Jefferson, 4 de julio de 1776
Parte del texto de la
Declaración de Independencia de los Estados Unidos
