sábado, 9 de junio de 2012

Dinero de Campaña Y Chivos Expiatorios


                                                                                                         
Por Aníbal E. Melo

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Si debes salir de una prisión, lo primero que debes comprender es: que estás en una! Si piensas que eres libre, no podrás escapar.”

George Ivanovitch Gurdjieff
Pensador y Filósofo Armenio (Enero 13, 1866 – Octubre 29, 1949)




Según informaciones publicadas en el Financial Times y en el Washington Post, Mitt Romney recaudó $17 millones más en financiamiento de campaña que Barack Obama, durante el mes de mayo, ($77 contra $60 millones).

Se dice que el equipo de Obama, se encuentra en estado de pánico. Y así debe ser.

Incluso si el Presidente es capaz de llegar a acercarse a la cantidad de dinero recaudada por Romney a través de canales regulares de campaña, Obama será superado por los multimillonarios fondos republicanos de los Super-PACS.

Se dice que Romney ya tiene 300 millones de dólares en dinero de Super-pac, en comparación con solamente $9 millones que tiene el Super-pac de Obama.

Informes de prensa dicen que los Super-PAC republicanos tienen el objetivo de conseguir mil millones de dólares para las elecciones de este otoño. Mil millones de dólares.

Basta pensar cuántos estudiantes podrían ir a la universidad, cuántas vidas se pudiesen salvar otorgando tratamientos médicos necesarios, el número de personas que padecen hambre que pudiesen tener alimentos, o sin hogar que podrían tener un lugar decente para vivir o, incluso, la cantidad de nuevos empleos que podrían ser creados con mil millones de dólares.

En cambio, este dinero lo más probable es que se usará para anuncios de ataques continuos e implacables que presenten al Presidente como un inmigrante ilegal musulmán que nació en Kenia, que ama a los terroristas, odia a Estados Unidos, a la democracia y a la libre empresa, y que quiere imponer el socialismo en este país, al tiempo que es el responsable de haber causado todos los problemas que existen en América.

Con estas disparidades en dinero de campaña, será simplemente imposible que Obama y los demócratas puedan rebatir esos ataques, y poder ser competitivos en las elecciones de otoño.

Pienso que lo que sucedió en la elección de Wisconsin, donde el Gobernador Walker fue capaz de mantenerse en su cargo gastando más que los demócratas, es sólo el preludio.

Por lo tanto, me temo que Romney será el ganador casi inevitable de este otoño.

No sólo es que Romney tiene todas las probabilidades de ganar la Casa Blanca, sino que los republicanos pueden lograr el control del Senado, ampliar su ventaja en la Cámara de Representantes, y ganar aún más legislaturas estatales y gobernaciones.

Gracias a que los republicanos tienen una ventaja enorme respecto del financiamiento de las campañas, su sueño de lograr una mayoría republicana permanente, es decir, un sistema de partido único en América, ahora está casi a la mano.

Y es que además de contar con una ventaja enorme de dinero, una vez que los republicanos se hagan cargo del Departamento de Justicia, no habrá más obstáculos para privar de sus derechos a las minorías y a otros electores de tendencia demócrata.

Entonces, en un futuro cercano, los republicanos ni siquiera tendrán que gastar grandes sumas de dinero para ganar elecciones. Sus oponentes simplemente no podrán votar.

¿Qué tipo de América vamos a ver si todo esto sucede?

Si uno se lleva por la retórica de campaña y las propuestas legislativas en el Congreso y en muchos estados, será un Estados Unidos sin sindicatos, sin Seguridad Social, sin Medicare, sin derecho al aborto o a la anticoncepción, sin acceso a atención médica decente para todos, excepto para los muy ricos, sin leyes de trabajo infantil, sin separación entre religión y Estado, sin derecho al voto de las minorías, de los jóvenes y de los menos favorecidos, sin igualdad de remuneración para las mujeres, y, por supuesto, sin inmigración.

Un Estados Unidos muy diferente al que todos conocemos hoy y que damos por sentado. Uno mucho más acorde con el Siglo 19. Eso ya lo estámos mirando a la cara.

La vida puede convertirse en una pesadilla para todos los que no son parte de la élite. (ciudadanos estadounidenses e inmigrantes por igual).

No soy insensible o indiferente a las protestas contra el número récord de deportaciones de Obama, con todo el oportunismo inhumano, la crueldad, la injusticia y el cinismo en cuestión.

Pero, a causa de toda esta situacion, Estados Unidos y los inmigrantes, nos enfrentamos ahora a algo de un orden completamente diferente.

Pienso que discutir sobre el número de deportaciones y los abusos relacionados con la inmigración, terribles como lo son ahora, es de poco valor cuando Estados Unidos está a punto de cerrar sus fronteras por completo debido a la búsqueda de chivos expiatorios.

Recordemos que por definición, un chivo expiatorio es un inocente acusado, culpado y castigado por las faltas, equivocaciones, y problemas de otro. Los victimarios culpan a la víctima para librarse de hacerse cargo de sus propias fallas.

Y es que para justificar el desastre que viene, si Romney y los republicanos se imponen a nivel nacional en las elecciones de noviembre, tendrán que buscar algún culpable, y claro, de seguro que seremos los inmigrantes.

Que bonito es Miches!