sábado, 31 de octubre de 2015

Inmigración y Competitividad

Por Aníbal E. Melo


Siempre he pensado que la inmigración tiene muchos efectos positivos que favorecen a los países receptores.

Y ahora, un reciente estudio del "Centro de Competitividad IMD" respalda mis creencias.

La competitividad de una nación,  depende en gran medida del grado en que los gobiernos crean un ambiente propicio para la apertura y desarrollo de nuevos negocios.

Un indicador clave es el impacto que tienen las leyes de inmigración; es decir, si estás restringen o no la capacidad de las empresas para llevar a cabo sus actividades de manera pronta y eficaz.

Una amplia Encuesta a Ejecutivos de alto nivel, llevada a cabo y publicada recientemente en el anuario del "Centro de Competitividad Mundial del IMD", nos muestra que los que  toman las decisiones en las empresas opinan de las naciones según su nivel de regulación de la inmigración.

Mientras más estrictas son las leyes, son menos competitivos, por lo que retienen una tasa menor de talentos.

En los últimos años Alemania y Malasia, por ejemplo, han tomado medidas drásticas contra la inmigración.

Datos muestran que muchos  Ejecutivos perciben que esos dos países han experimentado una disminución en la disponibilidad de mano de obra calificada y de profesionales  con experiencia internacional significativa.

Debido a esto, líderes empresariales opinan que el ambiente de negocios en Alemania y Malasia ha perdido atractivo para los extranjeros altamente cualificados que pudiesen ir a contribuir a impulsar la creación, desarrollo y el rendimiento de las empresas.

Por otro lado, Ejecutivos indican que en el mismo período, Qatar, que tiene políticas "relajadas" de inmigración ha experimentado mejoras en la disponibilidad de trabajadores calificados y competentes, y que su atractivo internacional se ha incrementado.

Por otro lado,  las políticas estrictas de inmigración afectan además  la productividad de los países.

Los Ejecutivos encuestados dicen que en Alemania, Malasia, Suiza y el Reino Unido, la productividad personal (según  los estándares internacionales) disminuyó entre el 2014 y el 2015.

Las percepciones de esos Ejecutivos participantes se aplican tanto a las grandes corporaciones, cómo a las medianas y pequeñas empresas.

Y mientras que la Encuesta mide "percepción" y no "datos duros", está  es muy importante porque si los que toman las decisiones en una empresa favorecen un lugar sobre otro, esto genera consecuencias en la creación de nuevos empleos y otros factores que influyen sobre las poblaciones locales y su prosperidad.

Es muy claro que, antes de apresurarse a cerrar sus puertos, los países y sus ciudadanos deben reflexionar sobre si lo que están haciendo es malo para la competitividad empresarial y por lo tanto malo para su economía.

Pienso que los políticos y el público en general deberían de asegurarse de no tirar el bebé junto con el agua del baño al momento de decidir sí reciben o no nuevos inmigrantes.