Por Aníbal E. Melo
Si damos lectura a los titulares de la
prensa escrita, es fácil caer en la complacencia sobre las buenas
perspectivas de una reforma migratoria que incluya dar condición
legal a los 11 millones de inmigrantes no autorizados que viven en la
actualidad en los Estados Unidos.
Y es que tras su estrepitosa derrota en
las elecciones de este año, aparentemente, los Republicanos han
podido rápidamente ver la luz y se han dado cuenta de que su
supervivencia depende de su capacidad para acercarse a los electores
latinos y asiáticos, mismos que se preocupan profundamente por el
tema de la inmigración.
Pero, el hecho de que muchos
republicanos están culpando a Mitt Romney por su plan de
"auto-deportación" no significa que se ha producido una
transformación fundamental en ellos.
La maquinaria republicana sigue siendo
fuerte y bien financiada, y todavía podría fragmentar la coalición
en ciernes compuesta por los latinos y otros grupos étnicos
minoritarios, cuyo éxito en las elecciones de este año sorprendió
a muchos.
Hay que recordar que por décadas, los
republicanos han sido conocidos como el partido de la supremacía
blanca.
La única excepción importante fue el
1986 y la amnistía de Reagan, basada en un pragmatismo y en el
respeto a una realidad que, por lo menos hasta el 7 de noviembre del
2012, había sido casi totalmente exorcizada de ese partido por el
Tea Party.
¿Qué garantía hay de que los
republicanos no van a usar píldoras envenenadas con el fin de
sabotear la reforma migratoria en esta nueva ocasión, y luego culpar
a los demócratas por su fracaso, una vez más?
¿Dónde está la señal de un
movimiento republicano para derogar las leyes anti-inmigrantes en los
Estados de Arizona, Alabama, y Georgia?
Por otro lado, la elección ha
terminado. Los latinos y otras minorías ya han hablado, y el
Presidente Obama no tiene que buscar su reelección.
¿Qué razón puede haber ahora para
continuar con las deportaciones aceleradas de millones de personas?
¿Por qué el Gobierno Federal sigue
expandiendo el programa Comunidades Seguras?
Hay muchas preguntas en el aire que
deben ser respondidas antes de que sepamos si va a haber algún
intento real de reforma migratoria.
Suerte!