Por Aníbal E. Melo
En los últimos años, en Estados unidos, ha habido una retórica muy acalorada en los debates sobre inmigración, etnicidad e identidad.
Pienso que las preocupaciones existentes - sobre ciudadanía, y sentido de propósito común - son válidas para todos los ciudadanos, especialmente en una sociedad multi-étnica.
Creo firmemente, en que la mayoría de
los estadounidenses, independientemente de su origen étnico, tienen
una visión compleja de lo que significa ser americano. Me explico:
Según dicha encuesta, casi todos los
estadounidenses creen en que la "libertad económica" es un
componente esencial de ser americano.
Una vez que perciben que no van a ser
discriminados, el "sentido de obligación," de decir que se
ven principalmente como estadounidenses, desciende considerablemente.
Cuando ese mismo entrevistado cree que los hispanos son maltratados, esta probabilidad desciende al 31% - una caída de 31 puntos porcentuales.
En los últimos años, en Estados unidos, ha habido una retórica muy acalorada en los debates sobre inmigración, etnicidad e identidad.
Pienso que las preocupaciones existentes - sobre ciudadanía, y sentido de propósito común - son válidas para todos los ciudadanos, especialmente en una sociedad multi-étnica.
Dado el ritmo de los cambios
demográficos de los últimos años en Estados Unidos, sería tonto
si no se pensase en estos temas. Pero hasta ahora la retórica
anti-inmigrante a menudo ha carecido de un análisis cuidadoso.
No es verdad que la creciente
diversidad en los Estados Unidos pone en peligro el consenso sobre lo
que significa ser norteamericano y nunca lo ha sido.
Me parece que la preocupación de una
posible desintegración nacional por causa de la inmigración, tiene
pocos méritos.
Viva La Diversidad |
En el 2004, la Fundación Russell
Sage patrocinó una encuesta dirigida a personas ciudadanas de
raza negra, latina y asiática que viven en los Estados Unidos.
En ella, se exploró el significado del
concepto "identidad estadounidense" y su impacto sobre los
debates contemporáneos sobre inmigración.
Este estudio se centró en las causas y
consecuencias de dos facetas de la identidad nacional:
- Cómo la gente define la identidad estadounidense, y
- Si las personas se ven a sí mismas como estadounidenses o principalmente como miembros de una etnia extranjera.
La Igualdad |
Del mismo modo, la gran mayoría sin
importar la raza o la étnia esta de acuerdo en que el ejercicio de
las tradiciones culturales de sus antepasados es otra de las
características de ser americano.
Estas creencias son muy importantes, ya
que nos dan una idea sobre como los americanos definen el concepto de
identidad.
Este concepto influye en las actitudes
sobre las políticas de inmigración, que tanto han pesado en la
creacion del "sentimiento anti-inmigrante", mismo que a la
vez se deriva de la creencia de que los inmigrantes violan las normas
que constituyen la identidad estadounidense.
Generalmente los nativistas, han
argumentado que el concepto al que todos los estadounidenses deben
darle prioridad es a la "identidad americana" en lugar al
del origen étnico.
Pero, esto es más complicado de lo que
se suele admitir.
Los teóricos contemporáneos de la
política anti-inmigrante en Estados Unidos, han sostenido que el
apego psicológico al país, es esencial para el desarrollo de una
devoción hacia el bien público y para fomentar la confianza y el
compromiso con la nación.
Desafortunadamente, esas afirmaciones,
dan como resultado y están muy ligadas a los malos tratos que
reciben muchos inmigrantes, mismos que no deben ser promovidos.
Según la encuesta en cuestión, los
latinos y los asiáticos, tienen una mayor probabilidad de sentirse
obligados a decir que se identifican principalmente como
estadounidenses, si perciben que pueden ser víctimas de
discriminación, si afirman otra cosa.
Entre los latinos que se identifican
como latinos, y que no perciben ser discriminados hay una oportunidad
del 62% de voluntariamente decir que son estadounidenses.
Cuando ese mismo entrevistado cree que los hispanos son maltratados, esta probabilidad desciende al 31% - una caída de 31 puntos porcentuales.
Mi conclusión es que la "identidad
nacional" dentro de la democracia estadounidense puede ser una
bendición o una maldición.
Bajo ciertas condiciones, puede mejorar
la participación, la confianza en el gobierno y el propio sentido de
obligación con la comunidad americana.
Pienso que la identidad nacional dentro
de la democracia estadounidense puede ser una maldición para la
sociedad en su conjunto cuando es tan fuerte que conduce al
resentimiento hacia los inmigrantes.
También puede ser una maldición para
los miembros de los grupos minoritarios que están apegados a su
identidad americana, pero que perciben que sufren discriminación.
Me parece que hay un anhelo real entre
el pueblo estadounidense de lograr un sentido de unidad en medio de
la diversidad - en lugar de un anhelo de sustituir la diversidad con
la uniformidad.
Las naciones hacen a los hombres, son
las constructoras de sus convicciones, de sus fidelidades y de sus
solidaridades.
Los que ocupan un territorio
determinado, llegan a ser una nación siempre y cuando sus habitantes
reconocen mutua y firmemente ciertos deberes y derechos en virtud de
su común calidad de miembros.
Es ese reconocimiento del prójimo como
miembro de clase lo que convierte a un país en una nación, y no
otros atributos, cualesquiera que puedan ser.
Finalmente, creo que la noción de
"identidad americana" es algo que el gobierno
estadounidense debe cultivar, pero siempre haciéndolo con un enfoque
cuidadoso, fomentando y apoyando la igualdad dentro de la diversidad.
Amen!