miércoles, 9 de marzo de 2011

Empresas piden Reforma de Inmigración

Por Aníbal E. Melo  


CEOs de más de 60 empresas líderes de los Estados Unidos están pidiendo una reforma justa de las políticas de inmigración. Dicen que arreglar el sistema infuncional actual es un imperativo económico y humano.

En un clima político marcado por una creciente retórica anti-inmigrante, estos líderes empresarios, están presionando por una política nacional de inmigración que proporcione una base para un crecimiento económico a largo plazo en un tema crucial de derechos humanos.

Entre los líderes de la iniciativa se incluyen a John Liu, Contralor de la Ciudad de Nueva York, así como la alta dirección de las empresas Mercy Investment Services, Inc; Boston Common Asset Management; Walden Asset Management, y la Asociación Unitarian Universalist.

El grupo pretende ser una voz razonable en el debate de inmigración, citando la necesidad de una mayor participación de las empresas en el proceso de la reforma.

La reforma migratoria es fundamental, dicen, para garantizar la competitividad de la fuerza laboral de los Estados Unidos y el cese de la explotación y abuso en las industrias que dependen en gran medida de trabajadores inmigrantes.

Para lograr su objetivo, el grupo está pidiendo a los CEOs de las principales corporaciones estadounidenses que aboguen por un enfoque equilibrado sobre la reforma migratoria que incluya un camino a la ciudadanía y mayores oportunidades para los inmigrantes. Además, se esta instando a los Directores Generales a participar en la discusión de los asuntos migratorios trascendiendo la política partidista y la retórica anti-inmigrante.

Se cita la recién creada ''Asociación para una Nueva Economía de América'' (http://www.renewoureconomy.org/) como ejemplo de cómo las empresas pueden contribuir al debate de una manera positiva. Esta es una coalición bipartidista encabezada por el Alcalde de New York, Michael Bloomberg, en la que participan los Directores Generales de Boeing, Marriot, Microsoft, News Corporation y Walt Disney.

En marzo del 2009, se estimaba que había 11.1 millones de inmigrantes no autorizados, de los cuales 1.1 millones son niños.

Cuatro millones de niños han nacido en los Estados Unidos que tienen al menos un padre inmigrante no autorizado. Estos niños son vulnerables a las leyes actuales, mismas que socavan su capacidad para convertirse en miembros contribuyentes de la sociedad.

Por otra parte, el temor a ser detectados, mantiene a los trabajadores indocumentados vulnerables a empleadores inescrupulosos que les retienen salarios, violan su seguridad, y los discriminan.