lunes, 16 de septiembre de 2013

La Irracionalidad De La Política Anti-inmigrante

Aníbal E. Melo
http://www.AnibalMelo.com


La racionalidad es la capacidad que permite pensar, evaluar, entender y actuar de acuerdo a ciertos principios.

El ejercicio de la racionalidad está sujeto a la optimidad y a la consistencia, por lo que cualquier pensamiento llevado a cabo mediante procedimientos racionales tiene que tener una estructura lógica distinguible.

Usando la razón, el ser humano intenta elegir para conseguir los mayores beneficios posibles en cada oportunidad.

Pero algunos seres humanos tenemos otras formas de tomar decisiones o idear comportamientos, donde la racionalidad no parece el principal factor.

Algunas conductas humanas parecen completamente "irracionales", desde la perspectiva de la maximización de la satisfacción a corto plazo, y muy pocas son completamente "racionales", en el sentido de maximizar la consecución de un objetivo.

Generalmente suele decirse que todos los humanos somos racionales, pero tal afirmación pasa por alto que existen personas que no actúan de acuerdo a lo que se define por racional, o lo hacen en un grado disminuido, por ejemplo: los anti-inmigrantes.

Escribo esto ya que más de la mitad de los nacimientos en Estados Unidos el año pasado, fueron de padres que no son blancos.

Por otro lado, más del 80 % de las personasde la tercera edad en este país son blancos no hispanos.

Y los hispanos somos la más joven demográfia del país, con una edad media que ronda los 28 años.

Ahora, el "Centro de Presupuesto y Prioridades Políticas" ha informado de que el "Seguro Social" y el "Medicare" ocupan una parte escalonada del presupuesto nacional.

En el presente, más que nunca, obtener un título universitario es un pre-requisito para la participación plena en la moderna fuerza laboral.

Eso pone de relieve el hecho de que una fuerza laboral latina educada es una necesidad para todos, no sólo para las familias hispanas, sino para todos los estadounidenses.

Sin embargo, un reciente informe del "Pew" sobre los "Logros Educativos de los Latinos en los Estados Unidos", ilustra el largo camino que aún nos queda por recorrer.

Mientras que algunos Estados están viendo un aumento en el número de latinos con título universitario, es preocupante que entre los que tienen el mayor porcentaje de hispanos, sólo Florida y Nueva York tienen logros educativos por encima de la media nacional.

California, por ejemplo, donde residen casi el 28% de todos los hispanos de la nación, sólo uno de cada diez (10.7 por ciento) de los adultos latinos tienen un título universitario.

Texas tiene la segunda población latina más grande de la nación - pero el número de los adultos hispanos con títulos universitarios es de sólo el 12.0%.

En Nueva York, el cuarto Estado más grande para los latinos, el 15.9% de los adultos de nuestra etnia tienen un título de licenciatura.

Y en Illinois, la tasa de logro universitaria de los hispanos es de solamente el 12.2%.

Es por eso que todos debemos estar preocupados sobre la capacidad de la nueva generación de hispanos para poder pagar por el aumento de la carga tributaria que asumirán debido al retiro de la población de baby boomers.

Y eso, me plantea preguntas sobre las prioridades de gastos del Gobierno.

Una forma de asegurar que los latinos tengamos más estudios y por lo tanto estemos mejor equipados para entrar en una fuerza laboral cambiante, es mediante el examen de la relación entre los hispanos en algunos de los Estados más grandes y su estatus de inmigración.

Creo que la cuestión más apremiante para la comunidad hispana es la integración social y económica de todos los indocumentados, ya que sin un proceso de integración formal, como el Dream Act o la Reforma Integral de Inmigración, los latinos seguiremos en desventaja.

Pero de hecho, Estados como Arizona donde residen muchos hispanos, los votantes aprobaron abrumadoramente una legislación anti-inmigrante super-agresiva como la Ley SB-1070.

Pienso que ese tipo de leyes que supuestamente solamente impactan a los inmigrantes irregulares, afectan a toda la comunidad hispana.

A menudo los indocumentados viven con familiares Residentes Legales o Ciudadanos de los Estados Unidos, por lo que a mi modo de ver, las leyes anti-inmigrantes representan una carga adicional muy pesada, ya que estas familias mixtas no pueden ayudar a desarrollar plenamente a los que tienen estatus migratorio, dañando las perspectivas de todos.

¿Pueden los envejecientes y los legisladores anti-inmigrantes de la nación ver lo importante que es para sus propios intereses, el que los hispanos tengamos éxito?

¿Están dispuestos a seguir cortando narices, a pesar de ser la de sus propias caras?

Son muchos los obstáculos que nos quedan por resolver a los inmigrantes hispanos, que somos los más pobres entre los nacidos en el extranjero, por lo que no hay necesidad de añadir más obstaculos sin sentido. 

Es por eso que digo que la política anti-inmigrante no es racional.