jueves, 10 de noviembre de 2011

El Mensaje ya Está Escrito: מנא ,מנא, תקל, ופרסין

                                                                                                         
Por Aníbal E. Melo

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Mene, Mene, Tekel, upharsin, son palabras escritas por una mano misteriosa en la pared del Palacio de Belsasar. Fueron interpretadas por Daniel, protagonista del Libro que lleva su nombre en la Biblia hebrea, como la predicción de la muerte del rey y su dinastía.


El incidente se describe de la siguiente manera:

Una vez, que el Rey Belsasar realizaba un banquete y bebia vino en vasos de oro del Templo de Yahvé, un hombre fue visto escribiendo en la pared unas misteriosas palabras.

Asustado, el rey ordenó a sus astrólogos le explicaran el significado de dichas palabras, pero estos no fueron capaces de hacerlo.

Daniel, fue convocado al palacio real, y el rey le prometió ricos presentes si él descifraba la inscripción.

Daniel le explicó al rey, que Dios tenía planeado el fin de su reinado, que ya lo había sopesado y encontrado culpable.
 

Por otro lado, el martes 8 de noviembre del 2011 será recordado como un día histórico para las fuerzas de la decencia y la tolerancia en los Estados Unidos.

Russell Pearce, Republicano, racista, pronto ex líder del Senado estatal de Arizona, aliado del alguacil del condado Maricopa, Joe Arpaio, mejor conocido por abusar y humillar a los indocumentados encerrandolos en carpas en pleno desierto, autor de la infame ley "Papeles, por favor," que ha servido como modelo para otras leyes de odio dirigidas contra latinos, asiáticos y otros inmigrantes no blancos en otros estados, perdió su escaño en una elección especial de destitución.


El mismo día, el gobernador republicano de Ohio, y "ex-analista" de Fox News John Kasich recibió una humillante derrota de manos de los votantes de ese estado cuando la ley que había patrocinado para restringir los derechos sindicales fue rechazada en un referéndum.



También en ese día, los votantes de Mississippi rechazaron el proyecto de ley "persona", que habría hecho cualquier tipo de aborto e incluso el control de la natalidad un delito, restringiendo severamente los derechos de las mujeres.
 

Todas esta victorias son buenas noticias para todos los que nos preocupamos por los derechos de los inmigrantes.

Los resultados electorales muestran que usar el odio en cualquier forma, como estrategia política, ya sea contra los inmigrantes indocumentados, los miembros de los sindicatos, las mujeres, los homosexuales o los musulmanes, es un juego perdido en los Estados Unidos.



Esto incluye no sólo a los pre candidatos presidenciales republicanos que están tratando de superar a los demás usando veneno frente al tema de inmigración, sino también al Presidente Obama y a su máquina despiadada, irreflexiva y aplanadora, que ha deportado a más de un millón de personas, dividiendo a las familias y, dejando a miles de niños estadounidenses sin padres, más que cualquier otra administración en la historia reciente.


Sin duda, algunos de los fanáticos reaccionarios que han sufrido las derrotas resonantes del martes van a tratar de leer la bolsita de Té con más odio, alimentados por la propaganda y el dinero de la extrema derecha.

 
Pienso que el verdadero mensaje de estas elecciones no se puede saber si tomas Té. Se puede ver, simple y claramente, leyendo a Daniel v. 1-28 en la Biblia hebrea.

Este mensaje contiene exactamente cuatro palabras, Mene, Mene, Tekel, upharsin, eufemismo que anuncia una muerte tan inminente y obvia que sólo un tonto no la ve venir.

Aquellos de nosotros que nos llamamos defensores de los inmigrantes, no debemos ver el asunto de la inmigración como un tema aparte, sin relación con lo que está ocurriendo. Si lo hacemos, estaremos copiando la estrategia divide y vencerás, que las fuerzas del privilegio y el poder utilizan para mantener el control del sistema político y económico del país.


La pregunta ahora es si los políticos que utilizan el odio, no sólo contra los inmigrantes sino también contra otras minorías, como forma de obtener o mantener el poder, han escuchado el mensaje de las recientes elecciones.