Aníbal E. Melo
http://www.AnibalMelo.com
AnibalMelo@yahoo.com
En mi último artículo, expuse mi
opinión de por qué la legislación de Reforma Migratoria en el
Congreso está completamente muerta, no sólo parcial o
temporalmente, y dije que nadie debería esperar que de repente
vuelva a la vida antes de la elección presidencial del 2016.
Al igual que en cualquier
asesinato, hay que buscar alrededor del muerto para poder
hayar al culpable.
La mano asesina obvia, por supuesto, es el
liderazgo republicano de la Cámara.
Pero ¿por qué ese liderazgo decidio
sacar el cuchillo y acabar con la reforma?
Una vez más, la respuesta es clara:
Todos, menos un puñado de republicanos
de la Cámara o bien se opusieron firmemente a la reforma o tuvieron miedo de apoyarla debido a la fuerte influencia del Tea Party en sus
Distritos.
El Tea Party y sus aliados son, por lo
tanto, los autores intelectuales de la muerte de la Reforma de
inmigración, como he estado argumentando en muchos de mis posts de
los últimos meses.
Pero ¿por qué el Tea Party es tan
opuesto a la reforma migratoria, y a la inmigración en general?
¿Es el Tea Party un movimiento
legítimo, con una filosofía de gobierno, e ideas que pueden ser
tomadas en serio?
¿Puede haber algo en común entre los
defensores de la inmigración y el Tea Party?
Para responder estas preguntas, es útil
echarle un vistazo más de cerca a la mentalidad de los que dicen
hablar en nombre del Tea Party.
Una de esas personas es Stephen
Steinlight, que se hace llamar "analista de políticas", del grupo de presión anti-inmigrante que se conoce con el
nombre engañoso de "Centro de Estudios de Inmigración".
En un mensaje que apareció en la pasada temporada de Navidad, Steinlight, dejo poco en el camino de la buena
voluntad o para sumar alegría a las fiestas de fin de año al
expresar su odio por los latinos.
En dicho mensaje, incluyó casi todos los estereotipos de insultos raciales que se han utilizado contra los inmigrantes en América desde el siglo pasado.
En dicho mensaje, incluyó casi todos los estereotipos de insultos raciales que se han utilizado contra los inmigrantes en América desde el siglo pasado.
Es una ironía que
alguien como Steinlight, quien dice que ha luchado para combatir el
flagelo del anti-semitismo, según su propia biografía, tenga los
mismos prejuicios contra los latinos que los que ha sufrido con tanta
energía su propio grupo étnico.
De acuerdo con un artículo suyo de
fecha 27 de marzo, Steinlight, dice que la Reforma migratoria "es
un complot contra Estados Unidos" que atenta contra la
Constitución y hace que los estadounidenses pierdan su libertad, al supuestamente, impulsar la idea de un Partido único.
También dice que los republicanos que
apoyan a CIR son: "psicóticos, codiciosos, políticamente
ciegos y estúpidos".
También añadió: "los nativos de
otros países con idiomas, y culturas diferentes, se constituirán en
el grupo demográfico dominante del país".
En cuanto a los líderes religiosos de
los diferentes credos: Católicos, protestantes y judíos que se han
pronunciado en favor de la Reforma, dijo:
"Que Dios me ayude a no encontrar
un bate de béisbol, porque entonces habría mucho menos de ellos
alrededor – ellos son los líderes de la amnistía".
Todas las declaraciones anteriores
pertenecen a la jerga clásica del odio.
También son, casi palabra por palabra,
el mismo lenguaje que se utilizó contra los judíos en el siglo 19 y
la primera mitad del siglo 20, por no hablar de los italianos,
polacos, Oriente Medio, Asia y África durante el mismo período.
En esencia, ese es el "pensamiento" que mató a la Reforma Migratoria en el 2014.
Y hasta que ese tipo de fanatismo y odio ciego no sea eliminado de la política estadounidense, la Reforma de inmigración seguirá durmiendo un sueño muy, pero muy profundo.
En esencia, ese es el "pensamiento" que mató a la Reforma Migratoria en el 2014.
Y hasta que ese tipo de fanatismo y odio ciego no sea eliminado de la política estadounidense, la Reforma de inmigración seguirá durmiendo un sueño muy, pero muy profundo.